VIVIR LA VIDA COMO MISION

En la conferencia realizada por el Padre Juan Jaime Escobar a alumnos de grado 10 y 11 y a egresados de diferentes instituciones, explicaba como queremos darle sentido a nuestra vida, que misión tenemos respecto a ella. Él nos explicaba un ejemplo de una persona que se encontraba en una montaña y llevaba una roca, pero que cada persona era responsable de encontrarle sentido a esa roca que estaba subiendo.
En ocasiones nos preguntamos para qué estudiamos, qué razón tiene estudiar si lo que hacemos, en el momento ya se nos olvida, y ese tema que una vez estudiamos lo estudiaremos mas profundo en la carrera que elijamos para nuestra vida.

Nosotros en la vida no somos la carrera que estudiamos, no es decir son ingeniero ambiental, porque estudie esto, yo soy lo que quiero hacer con mi vida, con mi existencia. Debemos tener claro que en la vida lo importante no es tener una carrera profesional, un buen nivel económico, lo que realmente importa es ser una gran persona.
El Padre Juan Jaime, plantea tres maneras de vivir:
1. Se puede vivir sin vivir
Esto es vivir sin ganas, sin entusiasmo, ni ideales, no sabemos para donde vamos nos da lo mismo lo que pase a nuestro alrededor.

2. Se puede vivir dejándose vivir la vida
Permite a los demás que elijan mi vida, que tomen mis decisiones. Nos da miedo arriesgarnos por esto dejamos que los demás hagan nuestra vida.

3. Se puede vivir haciendo de la vida la misión para la vida
Decidir por mi misma, lo que yo quiero ser, la huella que quiero dejar en la historia.

La vida es lo más bello, no es fácil vivirla, está se deshace continuamente, es difícil aceptar el sufrimiento y el dolor, pero es la oportunidad para mostrar que todo es posible mientras vivamos tanto lo bueno y lo malo, nadad es posible sino vivimos.
Debemos dejar atrás nuestros miedos, seguir nuestro camino guiándonos por nosotros mismos no dejando que los demás influyan en nuestras decisiones. Vivir la vida, disfrutarla aceptar que en ocasiones sufrimos pero debemos dejar esto atrás y seguir adelante triunfando en cada paso que demos.